miércoles, 15 de abril de 2009

Para la ternura ...

La gente está tan acostumbrada a ser infeliz, que la sensación de felicidad les resulta sospechosa; la gente está tan reprimida, que la espontánea ternura le incomoda y el amor le inspira desconfianza.

1 comentario:

Josi dijo...

Me ha encantado la reflexión.
Me encantará leer la siguiente :)